Gran convocatoria al seminario sobre el Canal Magdalena. Después que el presidente Alberto Fernández anunciara su licitación, el tema ocupa un lugar preponderante en la agenda del sistema fluvial marítimo argentino y su consecuente impacto de nuestra soberanía.

El salón del Consorcio de Gestión del Puerto La Plata quedó chico por la cantidad de gente que se acercó a escuchar las exposiciones. Se pudo ver entre otros, al vicepresidente de la UNLP Fernando Tauber, al ex subsecretario nacional de puertos y vías navegables Horacio Tettamanti, al CEO de TecPlata Juan Pablo Trujillo, empresarios y funcionarios del sector, políticos, dirigentes gremiales y público interesado en la cuestión.

El presidente del Consorcio de Gestión del Puerto La Plata, José María Lojo fue el que inició el seminario señalando “que el Canal se haga por los beneficios que tendrá para la Región, la Provincia y el país”. “Lo más importante es que el Canal Magdalena es el canal natural de acceso para el Río de la Plata y cuenta con ventajas técnicas que van a permitir que las grandes embarcaciones que hoy ingresan al Río lo hagan con mucha más seguridad, mejor conexión y nos permita que los puertos de la ribera del Río del lado argentino se desarrollen de tal manera para que podamos asegurar una muy conectividad entre nuestra zona núcleo de producción y la zona de destino de la mercadería”. En otro párrafo de su alocución habló sobre los beneficios económicos concretos que significan el dragado y balizamiento del canal en cuestión “vamos a lograr que los fletes sean mucho más baratos y además que se establezcan servicios para abastecer a los buques desde argentina, que van a permitir que la zona cercana a Punta Indio, General Lavalle y Magdalena, tenga un fuerte desarrollo económico”.

Luego fue el turno del entrerriano Hernán Darío Orduna, quien está al frente de la Unidad Ejecutora Especial Temporaria Canal Magdalena, cargo que ocupa “ad honorem”, también es el actual responsable de Ente Nacional de Control y Gestión de la Vía Navegable, además desde febrero del 2021, Orduna es delegado argentino ante la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU).
Entre los principales conceptos que explicó dijo “La superioridad técnica del Canal Magdalena es insoslayable, no sólo por su alineamiento en la dirección de las corrientes marinas, que lo hacen más rápido, sino por su bajo costo de dragado, que no alcanza a la mitad de lo que se debe invertir en el Punta Indio con el mismo fin”.
“Tenemos que hablar de un sistema de navegación fluvial-marítimo. Un buque que viene de Bahía Blanca o de Ushuaia para ir a Rosario, Paraná o Corrientes, tiene que desviarse hacia el Uruguay para recién después volver a los ríos argentinos”.

Explicó también otras ventajas del Canal Magdalena
“Menores costos del transporte fluvial por menor volumen de dragado del Canal Magdalena respecto al Canal Punta Indio. Menor costo de tripulación. Menor costo de combustible. Menor costo de honorarios de prácticos. Menor costo de seguros.
“Todo esto significa un mayor precio de venta para los productos exportables y un menor precio de compra para los bienes importados” concluyó Orduna.
Seguidamente uso de la palabra Agustín Barletti Editor del suplemento Transport & Cargo del diario El Cronista. Escritor con nueve libros publicados, entre otros La hora del Canal Magdalena.
Lo primero que señaló el periodista “Qué más allá de las cuestiones, técnicas, políticas, económicas, logísticas, con solo mirar el mapa del Río de La Plata y el proyecto, no hace falta más nada, es simplemente una cuestión de sentido común”
Agustín Barletti, destacó que el canal Sur, como se denominó en algún momento, o el canal Magdalena, ya se utilizaba en el siglo XVII para el ingreso al Río de la Plata. Su diseño, con diferencias fundamentales respecto al de Punta Indio, representa beneficios indiscutibles para la Argentina. Sus 150 metros de ancho de solera permiten un canal de doble vía, que posibilita ingresos y salidas simultáneas, y genera un área de servicios con mano de obra argentina”.
También advirtió que como lo señalaron sus predecesores en el uso de la palabra “el canal orientado en el sentido natural de la corriente, se abaratan los costos de mantenimiento y mejoran los tiempos de navegación. Esto es así porque se habilita una salida y entrada directa hacia el mar desde la Argentina, y viceversa; uniendo al país marítimo con el fluvial. También implica menor tiempo y menos costo para que las naves de mayor tamaño puedan completar carga en puertos como Bahía Blanca o Quequén, y evita la navegación en la Zona Alfa, frente a Montevideo, para los buques que, en un 90% de los casos, se dirigen o provienen de puertos argentinos”.
Barletti que fue uno de los primeros periodistas en escribir sobre las ventajas del Canal Magdalena se mostró optimista afirmando que “El proyectado canal ya cumplió con todos los requisitos establecidos por el Tratado del Río de la Plata y su Frente Marítimo, fue aprobado por el Uruguay, y tiene asignada la partida presupuestaria para su ejecución”.

Finalmente fue Juan Cruz Lucero, subsecretario de Asuntos Portuarios de la Provincia de Buenos Aires, quien no abundó en los detalles técnicos, sino que se refirió a lo que significa políticamente para la provincia de Buenos Aires y para todo el país.
Recordó “esta obra fue impulsada por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y discontinuada en el año 2016 por la gestión anterior” y reforzó la afirmación del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof quien sostuvo que “la ejecución de este proyecto es un acto de soberanía ya que le permitirá al Estado recuperar recursos de la Provincia y del país”.
“Por sus beneficios económicos, logísticos y geopolíticos, con el Canal Magdalena lograremos multiplicar la generación de riqueza en la Provincia, integrar nuestras distintas áreas geográficas y regiones, mejorar la distribución del ingreso, generar puestos de trabajo y asegurar un futuro más próspero para las y los bonaerenses”, concluyó
El seminario fue muy importante ya que los expositores pudieron poner en valor la importancia del Canal Magdalena para la región, para los puertos de la provincia, para la eficiencia de la logística nacional y por sobre todo para la soberanía de nuestro país. Es de esperar entonces que el proceso licitatorio se comience rápidamente y las obras empiecen lo más pronto posible de manera tal que no haya lugar para arrepentimientos o sabotajes a esta idea que es una cuestión de estado, que nos va a permitir dar un paso adelante en la defensa de nuestra soberanía nacional.