Hasta el momento no se pudo consensuar ni un bono ni un aumento salarial
La tensión entre las cámaras empresarias del sector y la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), creció en los últimos días por la falta de un acuerdo salarial que recupere lo perdido en el último trimestre a causa de la inflación, y eso hace temer una “parálisis” en la actividad que derive en una falta de insumos.
Además, se dispuso el estado de alerta y movilización, al tiempo que comenzaron las asambleas informativas en cada fábrica de todo el país.
Recordemos que el miércoles pasado volvió a fracasar la audiencia de discusión entre las partes e incluso la dirigencia gremial rechazó un nuevo encuentro propuesto para el jueves.
Si bien se admitió que se intentará algún tipo de negociación no oficial, se percibe que la postura empresarial no es permeable a los pedidos que le realizaron desde el sindicato.

El pedido del gremio es una suba del 30% para el período julio-septiembre.
Reclaman además un 10% de compensación por atraso de los sueldos en el trimestre previo. Y el requerimiento, que realza en cuanto a este capítulo de la puja salarial, es el reclamo por el pago de un bono de $60.000 por el Día del Metalúrgico.
Los directivos de las distintas cámaras sostienen que no lo pueden pagar.
Según indicó el gremio, los representantes de: ADIMRA, AFAC (autopartistas), CAMIMA (PyMEs), AFARTE (electrónicas de Tierra del Fuego), CAIAMA (aluminio) y FEDEHOGAR (electrodomésticos) desconocen que se recompongan los salarios del trimestre pasado.